domingo, 7 de septiembre de 2008

Gimme a lil push, darling

Le habían dicho que pintara su habitación. Pobre idiota. Si hubiera sabido que pintar era tan dificil jamás se hubiera puesto a pretender que tenía ese talento. Personalmente, el único sector que atrae mi atención es el de la llave de luz: Me subiría a una silla y le daría negro a todo, pero la silla la tiene el pequeño imbécil, que está por arruinar la única pared decente que queda.

2 comentarios:

val dijo...

De todos , este es el que más me gusta. Conocía tus otras vetas artísticas, pero esta me sorprende más. Se nota una evolución en tu pintura de un año a esta parte.Saludos.Val

Javier dijo...

Es extraño que sin conocerme sepas quien soy. Me pregunto qué te comunica esta obra o por qué la destacás sobre el resto. Espero averiguarlo algun día.